Sinopsis:

Un nuevo caso del pesquisidor Fernando de Rojas en la Salamanca de finales del siglo xv. El bachiller Fernando de Rojas recibe el encargo de investigar el extraño asesinato de un estudiante de la Universidad de Salamanca. Así comienza una intensa aventura en la que iremos recorriendo los más diversos ambientes de una ciudad donde nada ni nadie es lo que parece, al tiempo que nos adentramos en su conflictiva historia, hasta llegar a descubrir los entresijos de unos crímenes que hunden sus raíces en el pasado y amenazan con desencadenar una guerra. Estamos ante una intriga detectivesca llena de giros, misterio y sorpresas. Por su compleja y apasionante trama desfilan personajes inolvidables y figuras históricas de todo género y condición, desde un conocido pícaro hasta la reina Isabel la Católica, pasando por la inquebrantable Lucía de Medrano, el maquiavélico Arzobispo de Santiago, Don Alonso de Fonseca, o el futuro Santo Fran Juan de Sahagún. Narrada con un estilo ágil, claro y preciso y grandes dosis de inteligencia, imaginación e ironía, El manuscrito de nieve es el resultado de una sabia y original mezcla de géneros. Pero también es una exaltación de la amistad, la igualdad y el estudio de las Humanidades, que para el autor son sinónimo de libertad, en una época de odios, discriminación y barbarie. Es la confirmación literaria de Luis García Jambrina, que con El manuscrito de piedra cosechó ya un enorme éxito de crítica y lectores e importantes galardones.

Reseña:

En esta segunda novela dedicada a las investigaciones de Fernando de Rojas en su vida en el Estudio Salmanatino, nos encontraremos a personajes que acompañaron a nuestro protagonista en la aventura anterior y un nuevo amigo se sumará a la investigación.

En esta ocasión, Rojas tiene que encontrar al asesino que va dejando cadáveres mutilados de personas que tienen que ver con la universidad desperdigados por toda la ciudad de Salamanca.

Rojas ha evolucionado del primer libro a este, volviéndose más despierto y comienza a comportarse de una forma un poco más profesional, con seguridad en si mismo. Pero mantiene la esencia del libro anterior, esa que lo hace tan característico.

Mejora el ritmo de lectura, la hambientación viene dada por el libro anterior, así que ya no tiene que pararse a explicar la vida de la época. Además, en este caso, no hay problemas burocráticos que haga falta explicar, haciendo que la velocidad de la lectura sea más rápida, ligera y fácil de leer.

La forma de conseguir las pistas y de resolver el misterio vuelve a sorprender. El modo de gestionar la información, no tener un perfil del asesino y dar con él de todas formas, lo hace muy original.

Y en esta ocasión, aparece un muchacho llamado Lázaro nacido en el Tormes, que traerá muy buenos momentos a la novela. Por su parte y por la de fray Antonio, estarán las escenas más cómicas o ligeras que contrarrestan el enfoque a la investigación.

Por eso y por muchos detalles más se lleva cuatro estrellas, incluso quizá cuatro estrellas y media.

¡A por El manuscrito de fuego!

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